Temporada de huracanes en el Pacífico será un 30% más activa

Historia por: Jorge Rodríguez Fotografía por: Servir.net Jue 11, May 2023

Según informes del Servicio Metereológico Nacional de México, la temporada de huracanes 2023 del Pacífico será un 30% más activa de lo normal. Esto debido a la influencia del Fenómeno de El Niño, el que se espera que se asiente por completo en las aguas ecuatorianas del Pacífico entre junio y julio de este año. Se prevé que su influencia provocará un aumento significativo de las temperaturas oceánicas durante los próximos dos años, esto de acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

En total, en esta temporada de huracanes 2023 se prevén de 16 a 22 sistemas hidrometeorológicos en el Pacífico, de los que entre nueve y 11 serían tormentas tropicales, de cuatro a seis huracanes categorías 1 o 2 y de tres a cinco huracanes de nivel entre 3 y 5.

Contrario al impacto que El Niño tiene en el Atlántico, en donde se pronosticó una temporada menos activa de lo normal, el aumento de las temperaturas del océano Pacífico occidental (Centroamérica) y una región del oceano Pacífico frente a la costa este estadounidense más fría de lo normal, propiciarán condiciones idóneas para la formación de sistemas hidrometereológicos.

Siempre según la agencia meterológica mexicana, en el territorio del país norteamericano, serían los estados de Baja California y Veracruz serían los más afectados por la formación de estos fenómenos atmosféricos. El sur de México y Centroamérica podrían verse afectados de alguna manera, pero el mayor impacto se sentirá con mayor intensidad en el norte de México.

Fenónmeno El Niño en el océano Pacífico.

El Niño para julio

Según informó el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), no será hasta hasta el mes de julio cuando se empezará a sentir la influencia de El Niño en la región centroamericana. «Lluvias irregulares e inferiores a lo normal, una canícula o veranillo prolongado y más intenso a mediados de año y el aumento de la temperatura superficial del océano Pacífico y del aire serían algunos de los efectos del fenómeno de El Niño en Centroamérica, a partir de julio de este año», dice la publicación.

Por ello, hicieron un llamado a los gobiernos de los países centroamericanos, particularmente a los Ministros de Agricultura de cada nación, a emprender «acciones de prevención y mitigación, e manera que puedan tomar acciones oportunas, con particular atención a los productores y los territorios rurales más vulnerables, como el corredor seco centroamericano, y a actividades como la siembra de granos básicos y la ganadería».

Es el sector agrícola centroamericano el que más teme la llegada del niño, ya que la falta de lluvias y las altas temperaturas afectarán de manera directa la producción de alimentos en los diferentes países del istmo. «El problema es que si los periodos de sequía se unen al de la canícula, que siempre se da en julio, el impacto sería fuerte tanto para el sector agropecuario como también para los mantos acuíferos», dijo a La Prensa Gráfica de El Salvador, el presidente de la Asociación de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (CAMPO), Luis Treminio

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