Reflexionar sobre el estado de nuestros pueblos y ciudades y sobre el derecho básico de todos a una vivienda adecuada. Ese es el objetivo principal de la celebración del #DíaMundialDelHábitat, instaurado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1985.
2018 es el año del Manejo de Residuos Sólidos Municipales, que busca fomentar y motivar al manejo adecuado de los residuos sólidos de parte de las ciudades del mundo. Según el comunicado de la ONU, «el manejo de los residuos sólidos municipales es un reto mundial que todos nosotros necesitamos abordar».
Para lograrlo se debe de «facilitar un entorno para desarrollar políticas, diálogos y alianzas» entre los diferentes actores de las sociedades mundiales. Además, se debe de «promover la creación de soluciones innovativas» y «movilizar recursos para hacer frente a los desafíos municipales de residuos sólidos».
Las tendencias de un manejo adecuado de los residuos sólidos ya ha llegado a Guatemala, aunque aún falta mucho por hacer. En 2015 el municipio de San Pedro La Laguna, en Sololá, prohibió el uso de plásticos, duroport y pajillas, lo que ha ayudado a mejorar la salud del entorno natural y urbano del lugar.
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Antigua Guatemala prohíbe uso de plásticos
Aunque es un buen inicio, la idea es «ir integrando otras facetas de la vida cotidiana de la gente, para que logremos un desarrollo sostenible según nuestra cosmovisión», dice Mauricio Méndez, alcalde de la localidad.
Hasta 6 municipios en el país han adoptado medidas similares. Sin embargo aún faltan medidas de mayor impacto para evitar el crecimiento desordenado de los centros urbanos.