Existen muchas especies de plantas y animales que ayudan a que los ecosistemas se mantengan en equilibrio, representando un beneficio para el medio ambiente. La disminución o sobrepoblación de alguna de ellas puede resultar en un desbalance drástico que altera el orden en diferentes cadenas alimenticias. El equilibrio beneficia a todos los seres vivos que habitamos este planeta, asegurando la continuidad de la existencia de todas las especies.
Es un grupo de insectos con unas 20.000 especies que colaboran para mantener la biodiversidad. Gracias a su ayuda se multiplican muchas plantas de flores y frutas que sirven como alimento de animales y humanos.
Existe una dependencia simbiótica entre las plantas y las abejas. Las primeras proporcionan de néctar y polen a las abejas para su alimentación. Y las abejas ayudan a polinizar al transferir semillas de flor en flor, siendo responsables de un tercio de la producción de la alimentación.
Son un grupo de mamíferos de la especie quirópteros (Chiroptera) con unas 1.100 especies. Su papel ecológico es vital, porque ayudan como polinizadores y controladores de insectos.
Habitan en casi todas las regiones del mundo, excepto en la Antártida. Tienen diferentes dietas, pero la mayoría, un 70%, son insectívoros. Algunas especies forman colonias de entre 20 y 50 millones de murciélagos y cada noche consumen aproximadamente entre 44 y 250 toneladas de insectos.
Es un conjunto de varios organismos (bacterias, algas, plantas y animales) que habitan en los cuerpos de agua, ya sean dulces o salados. Existen tres grupos principales.
El fitoplancton es el más importante y abundante. A través del proceso de fotosíntesis contribuye con el 50% de oxígeno del planeta, algunos grupos que lo conforman son las cianobacterias, los dinoflagelados y las diatomeas. El zooplancton está formado por protozoos y metazoos, se alimentan del fitoplancton. El grupo del bacteriaplancton está compuesto por bacterias y algas que ayudan a destruir el material desechable que llega a los océanos.
El plancton es la base de la cadena alimenticia de los mares, sin su existencia no habría barreras coralinas.
Son los jardineros oficiales del bosque. A través de sus hábitos cotidianos, como alimentarse o defecar, esparcen semillas por los bosques.
La Universidad Autónoma de México emitió un comunicado, respaldado por el investigador Alejandro Estrada Medina, en el que explica que estos animales ayudan a regenerar los ecosistemas mediante la dispersión de semillas. Gracias a que sus grupos sociales son nómadas el esparcimiento de especies vegetales cubre grandes distancias.
Algunas especies se ven amenazadas por la cacería furtiva, el tráfico ilegal y la destrucción de su hábitat.
Son insectos coleópteros emparentados con los gorgojos y las luciérnagas. Su presencia en los bosques y jardines funciona como un insecticida natural contra ácaros y pulgones, porque se alimentan de estos bichos y no de plantas. Son valiosas para mantener el equilibrio biológico al evitar el uso de insecticidas químicos ayudando a mantener libres de riesgo las cadenas tróficas.