Entre los meses de enero a abril, el Océano Pacífico es un espectáculo digno de observar, gracias a la visita de las ballenas jorobadas y otros cetáceos. Estas vienen en busca de aguas más cálidas para buscar pareja, tener a sus crías y en busca de alimento.
Debido a que esto atrae a cientos de turistas cada año, el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP), dio a conocer el Reglamento para la Observación de Cetáceos en Aguas Guatemaltecas en Actividades Turísticas y Recreativas.
La temporada de avistamiento de ballenas comienza en enero de cada año. Esto se debe a que las aguas de esta parte del planeta son más cálidas que las del norte y las ballenas jorobadas las aprovechan para buscar pareja, dar a luz a sus crías y buscar alimento.
En esta época se pueden observar diferentes tipos de cetáceos. Catalogados como mayores y menores, las especies que habitan esta parte del océano son delfines, las ballenas jorobadas, las falsas orcas, los cachalotes enanos y el rorcual tropical. También se pueden ver tortugas marinas.
Cada touroperador, y guías de turismo, deben de estar registrado en el Instituto Guatemalteco de Turismo (INGUAT). Los guías, además, tienen que tener un permiso especial extendido por el CONAP para realizar este tipo de actividades.
Para la observación de cetáceos mayores, la embarcación deberá mantenerse todo el tiempo a una distancia mínima de 100 metros. El acercamiento debe de hacerse por los costados y se permite únicamente a tres naves de manera simultánea.
Para evitar estresar a los animales y provocar comportamientos agresivos, el tiempo máximo de observación es de 25 minutos, contabilizados a partir del primer avistamiento. Es importante recordar que la observación de vida silvestre debe de realizarse con mucha precaución y respeto hacia el espacio de los animales.
Si deseas obtener el reglamento completo, puedes visitar el sitio web de CONAP para descargarlo.
Foto de portada: PNUD Guatemala