Esquipulas Palo Gordo muestra su maquila artesanal de alimentos

Historia por: Jorge Rodríguez Fotografía por: Jorge Rodríguez Lun 9, Ene 2017

Lo usual en el departamento de San Marcos, fronterizo con México,  es que la mayoría de pobladores de la zona rural decidan emigrar hacia el norte, en busca de mejores condiciones de vida.

En su mayoría son agricultores y cruzan la frontera mexicana para laborar como jornaleros en diferentes fincas y granjas del vecino país. Aunque común, es una práctica que los propios pobladores buscan disminuir.

“Tomar la decisión de salir de aquí es arriesgado, no solo por los grandes riesgos y las cosas que se ven durante todo el camino, sino también por dejar a la familia atrás”, dice Aura Pérez, madre de tres hijos. Esta situación llevó a varios de ellos a pensar ‘fuera de la caja’.

Plantas procesadoras artesanales

Abraham Valente, agricultor de San Marcos, es parte del proyecto de maquila de hortalizas en San Marcos, Guatemala. Foto: Jorge Rodríguez/Viatori

El clima frío y la altura de las tierras de San Marcos son condiciones propicias para la siembra de diferentes productos agrícolas: papa, trigo, avena, cebada, manzana, durazno, melocotón y hortalizas, entre otros.

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“Muchos de estos productos se exportan a Estados Unidos”, dice David Mérida, representante de la fábrica Procesadora de Vegetales, en Esquipulas Palo Gordo. Entre la cosecha y la exportación, algunos productos (como la col de Bruselas) pasan por un proceso de limpieza, precocido y congelado. “Fue en ese instancia que vimos que podíamos generar trabajo”, agrega Mérida.

Es un trabajo sencillo que ha permitido a varias familias tener un ingreso estable y un trabajo en el que apoyarse. Cada empleado, con cuchilla en mano, corta el tronco de las pequeñas coles y selecciona el producto de acuerdo a las especificaciones del cliente. Después de tres años de funcionar, esta planta, junto con otras dos en la aldea Ojo de Agua, Esquipulas Palo Gordo, cerca de 1.500 personas se han visto beneficiadas.

Para garantizar el correcto manejo de los alimentos que ahí se procesan, estos pequeños empresarios reciben capacitación y ayuda técnica de parte de instituciones como FAO Guatemala y otras involucradas en el Programa Conjunto de Seguridad Alimentaria y Nutrición que funciona en la zona de San Marcos.

Migración a la inversa

El proceso de maquilado de hortalizas requiere de herramienta y entrenamiento básico. Foto: Jorge Rodríguez/Viatori

Damaris Ruano, madre soltera originaria de Jutiapa, a unos 430 kilómetros al este de Esquipulas Palo Gordo, decidió trasladar toda su vida a esta zona. Las costumbres, el clima, el idioma y la comida son completamente diferentes a las de su lugar de origen, “pero tenemos trabajo y hemos podido salir adelante”, dice.

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“Conmigo trabaja mi hijo y en época de vacaciones del colegio viene mi hija de 15 años a ayudarme”, Han recibido cursos de manipulación de alimentos, procesos protocolarios de salud preventiva y seguridad laboral. 

Este innovador proceso espera convertirse en un modelo de negocio propio, en donde se evite la participación de intermediarios, para ser los propios productores quienes realicen las exportaciones directamente hacia los clientes.

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